Hacía un par de meses realizamos un maravilloso paseo con raquetas de nieve por Port de Comte. La cuestión es que aquel día la excursión era de iniciación y debía ser sencilla y corta, por lo que no ascendimos a ninguna de las cimas de Port del Comte. Así que la idea hoy era recorrer todas las cimas que pudieran tener algo de interés en la Sierra de Port del Comte. Ahora está toda completamente limpia de nieve y el avance será rápido. Además, las pistas de esquí están cerradas, por lo que la zona se torna tranquila y muy poco transitada.
Llegamos al parquing de l'Estivella, al mismo sitio donde iniciamos el paseo en raquetas un par de meses antes.
El día es soleado, pero hace un poco de fresco. Se nota que ya estamos en alta montaña. Comenzamos el ascenso, por una pista de esquí que se dirige directamente al Prat de l'Orri. Al poco de salir pasamos al lado de un estanque, que parece de origen artificial, en medio del Clot de la Vall.
Desde aquí la pista de esquí sube con fuerte pendiente, hasta las immediaciones del Prat de l'Orri, donde el terreno es más amable.
Desde este punto nos podemos dirigir directamente al Oeste para ir a buscar el Pedró dels Quatre Batlles, la cima más alta de la zona, o encaminarnos hacia el Este para subir al Tossal de l'Estivella, la cima más oriental de Port del Comte. Ascendemos primero esta última, donde se nos ofrecen buenas vistas a la Serra del Cadí, al Pedraforca y a la Serra del Verd.
El macizo es prácticamente una gran llanura en su parte más alta y hay más distancia entre cimas que desnivel. De camino al Pedró dels Quatre Batlles, nos desviamos un poco para ascender a la Tossa Pelada. Luego retomamos el camino principal para llegar rápidamente al Pedró, techo de la comarca del Solsonès. Las vistas desde esta cima compensan el poco atractivo de la sierra en esta zona, ya que es una zona árida y con relieves poco llamativos. La vistas abarcan desde el Montseny y Montserrat hasta las sierras del Turbón y de Posets-Maladeta, en Huesca, pasando por la Pica d'Estats y sendas cimas andorranas y del Pirineo de Girona. En la cima hay numerosos plafones que nos indican el nombre de las cimas que vemos. Podemos verlas en este vídeo, donde se escucha cómo soplaba el viento ese día en la cima.
Tomamos algo resguardados del viento y descendemos hacia el Xalet de Rialb para encarar el ascenso al Puig de les Morreres, en la Serra de Querol, que se distingue claramente por el inmenso repetidor que hay en su cima.
Poco antes de llegar al Xalet de la Bòfia llegamos a unos extensos prados y a una zona con pinares.
Finalmente llegamos al Xalet de la Bòfia, casi derrumbado y cercado para evitar accidentes.
Desde aquí tardaremos más o menos media hora en alcanzar el Puig de les Morreres. El camino es claro y el ascenso es bastante suave, por lo que se alcanza con bastante facilidad. En esta cima no tenemos una vista tan amplia como en el Pedró dels Quatre Batlles, pero vemos mejor la zona montañosa del Solsones: desde la Serra dels Bastets y el Pla de Busa a la Mola de Lord, con Sant Llorenç de Morunys y el Pantà de la Llosa del Cavall entre ellos.
Descendemos ahora del Puig de les Morreres por la arista, dirigiéndonos al cercano Mirador de Querol, justo encima de las instalaciones de las pistas de esquí de Port del Comte.
Desde este mirador ya sólo nos queda retornar al parquing donde tenemos el coche aparcado. Para ello, empezamos a descender por una pista de esquí y luego flanqueamos por terreno sencillo pero sin camino para no perder demasiada altura y recortar un poco de distancia hasta la pista que nos conducirá de retorno al punto de partida.
Ahora ya hemos recorrido las cimas de Port del Comte y de la Serra de Querol, muy recomedables para quien quiera caminar por alta montaña sin afrontar grandes desniveles ni complicaciones.