Esta semana santa hemos hecho una sencilla pero interesante excursión, el la que con poco esfuerzo hemos podido disfrutar de una buena panorámica. Nos acercamos al Coll de Montllobar, en el límite del Pallars Jussà tocando a La Noguera, donde hay una buena explanada para dejar los coches, y ya se puede observar una panorámica del Pallars con sólo bajar del vehículo. Pero nuestro objetivo era subir un poco más para tener aún mejores vistas.
Frente a la explanada, al otro lado de la carretera, parte un camino que asciende hasta el Castell de Montllobar, un castillo medieval de la época románica, del que tan sólo queda una torre y restos de los muros, y al que se llega sin demasiado esfuerzo en una ascensión suave por la pista de poco más de un kilómetro.
Desde el castillo ya se amplía la panorámica, pero siempre es mejor subir a un pico para tener mejores vistas, y Montllobar está en la lista de 100 cims de la FEEC que tenemos por objetivo ir completando, así que tras una corta visita a los restos del castillo y al mirador ubicado un poco más arriba, desde donde vemos volar muy cerca unos cuantos buitres.
Seguimos la ascensión hasta el pico que da nombre a la zona, por una senda desdibujada, pero marcada por hitos, y una pendiente más pronunciada de 1'5 km. aprox.
El pequeño esfuerzo merece mucho la pena porque las vistas desde el pico mejoran mucho, especialmente en un dia de cielo despejado como el que tuvimos la suerte de disfrutar, y con tantas montañas nevadas al fondo, abarcando desde los picos más altos del Pirineo de Huesca, pasando por otros más cercanos como los de La Vall Fosca, o Sant Corneli, y terminando en la Serra del Montsec.
Seguramente también fue un acierto hacer esta excursión en época de poco calor, ya que aparte de disfrutar de la vista del Pirineo nevado, la ascensión se hace con muy poco esfuerzo. En verano no dejará de ser sencilla, pero hay poquísima sombra en todo el camino y la zona es muy seca y calurosa.
Ya en el coche, para aprovechar el viaje, la vuelta hacia Tremp la hicimos por la carretera que pasa por Alsamora y Sant Esteve de La Sarga, y varios pueblecitos bastante peculiares. Quizás Alsamora es el que más merezca la pena detenerse para ver de cerca su torre, sus curiosas calles.
