Tercera jornada de rutas en Dolomitas. Tras coronar la cima más alta del macizo y descubrir la bucólica zona de Cinque Torri hoy visitaremos la que, muy probablemente, sea la zona más visitada y fotografiada de estas montañas: Tre Cime di Lavarado. Llegamos al aparcamiento del Rifugio Auronzo algo antes del atardecer y nos da tiempo a hacer un pequeño paseo a estudiar la ruta a realizar.
El ascenso a cualquiera de las tres cimas es por vías de escalada, por lo que optamos por hacer una ruta circular en la que disfrutaremos de estas increíbles cimas desde todos los ángulos y pasaremos por diversos refugios.
Salimos por el cómodo camino del Rifugio Auronzo al Rifugio Lavaredo, por el que pronto nos situamos bajo las Tre Cime.
Mirando atrás ya empieza a quedar pequeño el Rifugio Auronzo y el Monte Cristallo le hace de telón de fondo.
En este tramo no hay ninguna dificultad y el desnivel es insignificante, por lo que podemos concentrarnos en las vistas y en lo pintorescos lugares que nos vamos encontrando. Una pequeña capilla, la Capella degli Alpini, adorna la falda de estas montañas.
Cercanos ya al Rifugio Auronzo tenemos nuevas perspectivas de las tres moles rocosas. Ahora se alza orgullosa sobre nosotros la Cima Piccola.
Sin más esfuerzo que caminar por pista o sendero menos de una hora, llegamos al Rifugio Lavaredo, detrás del cual destaca el caos de rocosas cimas que hay junto al Monte Paterno.
Ahora tenemos un pequeño tramo de ascenso hacia el primer collado del día, la Forcella Lavaredo, donde ganamos otra perspectiva nueva de las archiconocidas Tre Cime.
Mirando hacia le otro lado ya vemos nuestro siguiente objetivo: el Rifugio Locatelli. Detrás hay numerosas y hermosas cimas, todas ellas con nombres italianos y suizos, los suizos un poco más complicados de pronunciar y leer para los que usamos la lengua castellana.
Por otro cómodo y marcado camino pronto llegamos al Rifugio Locatelli, que vuelve a ofrecer nuevas perspectivas.
Desde los laguitos dei Piani a las espectaculares vistas hacia el Monte Paterno y de nuevo las omnipresentes Tre Cime, donde hay instalada una famosa vía ferrata.
Al lado del refugio hay otra zona plagada de búnquers de la Gran Guerra.
Tras disfrutar de estas maravillosas vistas, empezamos a descender hasta alcanzar una especie de hoyo, en el punto más bajo de nuestra travesía.
Llegados aquí ya hemos completado más de la mitad de nuestra ruta circular. Recuperamos altura por el tramo más inclinado del recorrido, que dura poco y tampoco tiene dificultad técnica alguna. Finalmente vuelve a aparecer el Monte Cristallo en el horizonte, así como el pintoresco lugar de Langalm, donde se puede tomar algo o comer.
Está siendo un día completo y reposado, donde las vistas cambian a cada momento. Sorprenden ahora las vistas a la parte suiza del parque de Tre Cime di Lavaredo.
Desde este punto nos queda ascender al Col di Mezzo, donde empezaremos a girar hacia el punto de partida. Volvemos a disfrutar de nuevas vistas, en este caso de las agujas de las Cimas Cadin y a la derecha la Punta Sorapiss, uno de los tresmiles de Dolomitas.
Y en breve ya estamos de vuelta en el parquing junto al Rifugio Auronzo.
Hemos disfrutado de esta vuelta. Han sido algo más de 4 horas con mucha tranquilidad y tiempo para hacer muchas fotos. Seguramente la ruta más visual de las que hemos hecho en Dolomitas, pero no la más entretenida para mi gusto. Con esto cerramos nuestro periplo por el macizo, aunque nos quedan ganas de ver más cosas. Veremos cuándo podemos volver.
Cuando volvemos con el coche nos encontramos una larga caravana de vehículos intentando acceder a esta zona. Parece que tuvimos suerte y llegamos en hora valle. Da gusto irse cuando ves las caravanas llegar.
Si quieres ver todas las fotos de nuestra vuelta a las Tre Cime di Lavaredo las tienes en este enlace.